
Canción de Joaquín Sabina, interpretada junto a Mercedes Sosa.
Historias de Cronopios y famas. (1962)
NaturalezArte30/01/2023 Julio CortazarEn los bancos y casa de comercio de este mundo a nadie le importa un pito que alguien entre con un repollo bajo el brazo, o con un tucán, o soltando de la boca como un piolincito las canciones que me enseñó mi madre, o llevando de la mano un chimpancé con tricota a rayas. Pero apenas una persona entra con una bicicleta se produce un revuelo excesivo, y el vehículo es expulsado con violencia a la calle mientras su propietario recibe admoniciones vehementes de los empleados de la casa.
Para una bicicleta, entre dócil y de conducta modesta, constituye una humillación y una befa la presencia de carteles que la detienen altaneros delante de las bellas puertas de cristal de la ciudad. Se sabe que las bicicletas han tratado por todos los medios de remediar su triste condición social. Pero en absolutamente todos los países de esta tierra está prohibido entrar con bicicletas. Algunos agregan: <y perros>, lo cual duplica en las bicicletas y en los canes su complejo de inferioridad. Un gato, una liebre, una tortuga, pueden en principio entrar en Bunge & Born o en los estudios de abogados de la calle San Martín sin ocasionar más que sorpresa, gran encanto entre telefonistas ansiosas o, a lo sumo, una orden al portero para que arroje a los susodichos animales a la calle. Esto último puede suceder, pero no es humillante, primero porque sólo constituye una posibilidad entre muchas, y luego porque nace como efecto de una causa y no de una fría maquinación preestablecida, horrendamente impresa en chapas de bronce o de esmalte, tablas de la ley inexorables que aplastan la sencilla espontaneidad de las bicicletas, seres inocentes.
De todas maneras, ¡Cuidado, gerentes! También las rosas son ingenuas y dulces, pero quizá sepáis que en una guerra de dos rosas murieron príncipes que eran como rayos negros, cegados por pétalos de sangre. No ocurra que las bicicletas amanezcan un día cubiertas de espinas, que las astas de sus manubrios crezcan y embistan, que acorazadas de furor arremetan en legión contra los cristales de las compañías de seguros y que el día luctuoso se cierre con baja general de acciones, con luto en veinticuatro horas, con duelos despedidos por tarjeta.
Canción de Joaquín Sabina, interpretada junto a Mercedes Sosa.
Definiciones espontáneas y viscerales de un sentipensador latinoamericano.
Una canción de Gustavo Cerati.
En la Argentina otro Crimen de Estado bajo el régimen de una gestora estatal consuetudinaria de la muerte de personas inocentes. Ante ello el poder de la palabra y la inspiración de la poesía como acto de denuncia e instancia refleja para redimir el dolor y la impotencia ante la impunidad.
Canción de Fito Paéz.
Una canción de Manal.
Un poema de Juan Gelman.
Canción de Nito Mestre.
El Fiscal Federal General de Rosario Federico Reynares Solari rechazó la solicitud del Municipio de Pergamino de levantar las medidas cautelares que prohíben las fumigaciones con agrotóxicos y obligan a garantizar agua segura. En un dictamen que refuerza la vigencia del principio precautorio y la centralidad del derecho a la salud, este caso se erige como bandera de los pueblos fumigados de la Argentina, en una pulseada histórica contra el poder del agronegocio.
La Cámara Federal de La Plata concedió el recurso ante Casación contra la sentencia que avala las fumigaciones con agrotóxicos en Pehuajó desconociendo las recomendaciones científicas. La concesión del recurso mantiene suspendida la Ordenanza local que autoriza las aplicaciones con venenos a 150 metros de la población pehuajense.
La Justicia federal de Rosario dio un paso clave en defensa de la salud pública con una resolución que convierte a Pergamino en símbolo de una lucha que atraviesa a pueblos de todo el país.
La Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo de La Plata dio lugar al amparo colectivo y ordenó la instalación de centros de distribución de agua potable para los vecinos.
Canción de Joaquín Sabina, interpretada junto a Mercedes Sosa.